
¡Ah, vamos a hablar de Cohere, ese pequeñín que salió de la nada y ahora está haciendo magia con las palabras! Mira, este cuatito fue cofundado por un tal Aidan Gomez, que no es cualquier alma perdida, no señor. Este compa estuvo metido en ese rollo del paper “Attention is All You Need” en 2017, que no, no es un manual de cómo llamar la atención de tu pareja, sino un estudio choncho que cambió todo el juego de la inteligencia artificial. Ahí nos presentó a los Transformers, y no, no estoy hablando de los robots esos que se hacen carritos y avioncitos.
Cohere es como el amigo que todos queremos tener, uno que te hace la tarea fácil. Han desarrollado una API que hasta tu tía que apenas sabe usar el WhatsApp podría integrar en sus proyectos. Y es que estos tipos están empeñados en hacernos la vida más fácil, permitiendo que cualquier mortal con ganas de innovar pueda usar su tecnología sin tener que sacarse un doctorado en mecatrónica.
Pero ojo, que no todo en la vida es lanzar tecnología al mundo y ya. Cohere también se pone muy serio con eso de la ética. Están allí sudando la gota gorda para que sus modelos no terminen siendo unos chismosos de barrio que solo dicen puras barbaridades. Trabajan duro para que sus creaciones no se vayan de boca y terminen creando un Terminator del lenguaje.
Y para que veas que no es juego, los inversores están tirando billetes a Cohere como si no hubiera un mañana. Este chaval ha cautivado a los peces gordos de la tecnología y del capital riesgo. Vamos, que no solo nosotros estamos alucinando con lo que estos genios están cocinando.
Así que ya lo sabes, si alguna vez necesitas un par de frases bien acomodadas o quieres impresionar en la fiesta de la empresa, pues ya sabes a quién llamar. ¡Cohere al rescate!